Cómo preparar café en cafetera italiana

Cómo preparar café en cafetera italiana

¿Sabías que preparar café en cafetera italiana puede marcar la diferencia entre un café mediocre y uno que te haga cerrar los ojos de placer? Te contamos paso a paso las claves para conseguir un café perfecto en cafetera italiana. ¡Vamos al grano!

¿Qué es una cafetera italiana y cómo funciona?

La cafetera italiana, también conocida como moka, es un clásico en todas las casas. Funciona con presión de vapor: el agua del compartimento inferior sube al superior al pasar por el café molido, extrayendo sus sabores y aromas.

Paso a paso: Cómo preparar café en cafetera italiana

1. Llena el compartimento inferior con agua

Si tienes agua mineral úsala en vez de agua del grifo. Llénala hasta la válvula de seguridad. No la sobrepases, ya que podrías alterar el sabor o dañar la cafetera.

2. Mide la cantidad de café

Aquí surge la pregunta: “¿Cuánto café hay que echar en la cafetera italiana?”. Llena el filtro de café molido sin presionarlo, nivelándolo con una cuchara. La molienda debe ser media-fina, parecida a la sal de mesa.

3. Coloca todo en su lugar

Inserta el filtro con el café en la base y enrosca firmemente la parte superior de la cafetera. Asegúrate de que esté bien cerrada para evitar fugas.

4. Elige el fuego adecuado

Una duda común es: “¿Uso fuego lento o alto?”. Lo ideal es comenzar con fuego medio hasta que el agua empiece a subir. Luego, reduce a fuego lento para que la extracción sea uniforme.

5. Controla el tiempo

“¿Cuánto tiempo debo dejar el café en la cafetera italiana?” Una vez que escuches un burbujeo constante, el café está listo. Retira la cafetera del fuego de inmediato para evitar que se queme.

¿Cómo hacer café para uno en una cafetera italiana?

Si preparas café solo para ti, elige una cafetera de tamaño pequeño, como la de 1 o 2 tazas. La proporción de agua y café debe mantenerse igual: hasta la válvula con agua y el filtro lleno de café.

Consejos finales para un café perfecto

Ahora que sabes todos los trucos, ¿te atreves a ponerlos en práctica?

Regresar al blog